Ciudad de México.- El especialista del Instituto de Investigaciones Antropológicas de la UNAM, Raúl Valadez Azúa, alertó que la relación hombre-perro, caracterizada por pautas equivalentes al cuidado de un niño ha favorecido el consumismo e individualismo, resultado del aislamiento personal, la inseguridad y la cibercomunicación, y puede llevar a trastornos psicológicos tanto en los individuos como en los perros.